60º Festival de San Sebastian: Minicríticas (IV)

Ya estamos acabando con el repaso de la 60 edición del Festival de San Sebastian. En esta ocasión rescatamos a Bypass, Tropicalia y la película que cerró la sección oficial, Quartet.
                                                                  

Bypass: es la película que sigue la estela del programa 'Vaya semanita' con parte de su elenco encabezado por Gorka Otxoa. La película es lo que parece, solo pretende que pases un buen rato con una comedia de enredos y lo consigue. A veces olvidamos lo difícil que puede ser que sea ría toda una sala con los diálogos de una película.  La verdad es que vino bien este tipo de películas para relajarnos de tanta seriedad en el Festival y nos alegramos que la sección Zabaltegui la programase. Es difícil puntuar este tipo de películas, pero es, sin duda, recomendable. No olvidar ir a verla con subtítulos que esta grabada en euskera. 6/10

Tropicalia: Otra de las películas que fueron exhibidas gracias a la sección Zabaltegui. El único documental que vimos, pero una de las películas que más me gustaron. Es tropicalismo es un movimiento que se dio en Brasil a finales de los 60' que reunió a lo más bohemio y hippy del país. Encabezado por Gilberto Gil y Caetano Veloso, que le dieron nombre al movimiento gracias a la canción Tropicalia  publicada en 1968. Tan solo un año después, la dictadura militar puso sus ojos en ellos y acabaron en la cárcel. Posteriormente Veloso se exilió a Londres, pero regresó a Brasil al cabo de un tiempo. Un documental de música de los 60 tiene una pinta estupenda y no defraudó. Una postproducción magnífica que dio un sentido a todos los documentos grabados de aquellos tiempos y un grafismo muy original. Genial descubrir todo lo que fue Caetano Veloso del que se decía que era uno de los artistas con más talento y más completo de los 70. A continuación una de las actuaciones que salen en el documental, grabada en la televisión francesa allá en 1972. 7/10

Quartet : La primera película dirigida por Dustin Hoffman (75 años) y que nos sitúa en una residencia de ancianos de antiguos músicos. Todos los años hacen una función para recaudar fondos para seguir manteniendo abierta la residencia. Este año, con la llegada de una antigua diva de la ópera (Maggie Smith) volverá a reunirse el cuarteto que cantó uno de los Rigolettos más recordados de la historia. Por supuesto su reencuentro no será amistoso y tendrán que superar cosas del pasado para relizarlo. Una de las cosas más entrañables de la película fue que salvo, el cuarteto, el resto no eran actores, sino antiguos músicos, que homenajean en la letras del final contándonos quienes habían sido. Genial también la actuación de Billy Connely, que hizo saltar las risas de la sala. Sin embargo, la película se hace un poco lenta, aunque el tema de las personas mayores suele llegar a nuestro corazón con facilidad y hay momentos de la película que emocionan.

Dustin Hoffman en la rueda de prensa

En la rueda de prensa tanto Dustin Hoffman (premio Donostia)  como Connely nos hicieron pasar un buen rato con sus bromas constantes sobre la vejez.  Hoffman dijo que "todos creemos que somos modernos porque somos los últimos, pero eso todas las épocas lo han sentido". Decía, por ejemplo, que el cine, algo que parece tan consolidado tampoco tiene tantos años "yo soy más viejo que el sonido", decía. "firmamos nuestro nombre en un pastel de hielo". También se quejaba de como la sociedad aparta a la vejez "¿Porqué dejan de llamar a la gente a partir de según edad, si aún sigues siendo competente?" Y ponía como ejemplo al saxofonista de la película que con más de 80 años tocaba mucho mejor que muchos jóvenes. 5/10