"La educación prohibida", un documental para la vida

   

“Muy poco de lo que pasa en nuestra escuela es verdaderamente importante. Nos enseñan a estar lejos unos de otros y a competir. Padres y maestros no nos escuchan. Por todo eso decimos basta. La educación está prohibida”

Con estas frases tan contundentes se establece el hilo argumental del documental "La Educación Prohibida", libre de ver y difundir en www.educacionprohibida.com

Este documental cuenta con casi 5 millones de visionados en la web y se suceden en el globo innumerables proyecciones autónomas desde el 30 de julio de 2012, día de su lanzamiento mundial. Proyecto inicial de la mano de German Doin se convirtió en un proyecto común, coofinanciado por 704 personas. Desde '24 Reflejos' invitamos a verlo, a hablarlo, a reflexionarlo en grupo, porque no deja a nadie indiferente.

Es un documental ameno, muy profundo, con numerosos fragmentos de entrevistas a personas relacionadas con el mundo de la educación alternativa de España y América Latina y que pone en tela de juicio gran parte de las bases de la educación actual convencional. Una película sobre la educación centrada en el amor, el respeto, la libertad y el aprendizaje.

Se suceden las críticas a los sistemas de evaluación, a la educación en sí misma comparada con un adiestramiento canino, a la lejanía docente-alumno, a la titulistis, etc. Acompañado de música, gráficas y partes dramatizadas, que ocurren en una escuela en la que un grupo de alumnos hace un escrito para el acto final de curso titulado “La educación prohibida”, el vídeo muestra otra manera de ver y hacer educación, alejada del poder, de la obediencia, alejada de necesidades generales, al fin y al cabo, otro modelo diferente desde la base.

Cartel de la película

La crítica, pese a ser contundente, es sana, un llamamiento a la necesidad de un cambio de sistema educativo. Dejar el sistema carcelario educativo por una escuela de paz y en el que valgan más las emociones que los números, una escuela en la que se formen personas, en la que dé gusto ir tanto a docentes como a educandos. Y en la que se le de pie a la imaginación y a la creación propia, más libertad y menos disciplina, tendiendo a estructuras asamblearias de toma de decisiones.

Tras 2 horas y 25 minutos de documental uno llega con el estómago encogido tras escuchar tantas verdades muchas veces jamás reflexionadas, tras entender parte de la realidad que hoy tenemos y por tanto que queda por hacer. Pero acabas, también, con una sonrisa, un aliento de esperanza por todas las personas que trabajan por mejorar la educación. Porque hay escuelas y personas, muchas veces excluidas e invisibilizadas, que intentan cambiar el modelo dominante, que pese a ser mayoritario muchas veces está muy lejos de ser el mejor. 9/10.  Publicado por Manuel.