Hace unos días el Festival de Cannes se rindió, una vez más, a los pies de Woody Allen. Es que Woody Allen es mucho Woody Allen cuando acierta con una película. A la espera de Midnight in Paris (que se estrena hoy) nos conquiste, en 24Reflejos elegimos nuestra película favorita de Woody Allen, aquella con la que nos rendimos a sus pies.
Woody Allen crea en Zelig lo que para mí es su obra maestra, el culmen del absurdo y de la hilaridad, y lo más curioso es que lo hace fuera de lo que es su registro habitual y en una obra desconocida para el público mayoritario. La película de la que hablamos es un falso-documental en el que se nos da a conocer un curioso personaje que, falto absolutamente de personalidad y autoestima, se dedica a adoptar los rasgos psíquicos y físicos de quienes le rodean, logrando camuflarse perfectamente con su entorno y consiguiendo la aceptación implícita en la semejanza. Cuando se descubren públicamente las características de este individuo, pasa a estudio médico y se convierte en un fenómeno mediático que atrae a las masas bautizándole como el “Camaleón” y en el que se inspiran para crear el hit del momento con coreografía incluida. La película recrea con una maravillosa fotografía en blanco y negro el ambiente de los años 20 y 30 aderezado con jazz, psicología y varios personajes históricos que tienen el honor de coincidir con Leonard Zelig como el Papa Pio XI, Josephine Baker, Al Capone, Marion Davies, Herbert Hoover, Scott Fitzgerald o el mismísimo Adolph Hitler. Elena
Un final made in Hollywood es el cine que habla sobre cine. Un director venido a menos encuentra la oportunidad de trabajar en una nueva película producida por su ex mujer y su futuro nuevo marido, pero justo antes de comenzar el rodaje sufre un episodio nervioso que le provoca una ceguera transitoria y le lleva a protagonizar situaciones absurdas que arrancan una carcajada a cualquiera. Woody Allen se interpreta a sí mismo más que nunca, encarnando a un director neurótico a la par que entrañable que hace lo imposible por dirigir su película a ciegas. Plagada de guiños a la profesión cinematográfica y con el mejor humor de Woody Allen, ésta es una película ideal para pasar una tarde de domingo pero que muy entretenida. Fácil, bonita y para toda la familia. Sara
Whatever Works (2009). Tanta sinceridad resulta abrumadora. Incluso más cuando los primeros 15 minutos son un monólogo crítico en tono de humor (aunque sin quererlo) de un hombre, Boris, que se dirige al espectador directamente, sin tapujos, escupiendo verdades teñidas de cierto cinismo y pesimismo. Un cóctel agridulce aderezado con una joven, Evan Rachel Wood, inocente e ingenua (rozando la estupidez) que provoca un cambio en la vida de un maniático de edad más que madura. Al contrario de lo que dice Boris, “si quieres una película reconfortante” tienes que ver esta. No es una obra maestra, pero merece la pena perder alguna hora de esta vida “tan decepcionante” para reírse de uno mismo. En palabras de Boris y de Woody Allen: “Siento decirlo, somos una especie fracasada”. Recomendación: bajo ningún concepto verla doblada. Puede reventar vuestros tímpanos. Deby
En Desmontando a Harry, Woody Allen cuenta la historia de un escritor que mezcla su propia vida con la de los personajes que crea, que a su vez son una versión ficcionada de su vida. Harry va a recibir un premio literario en una universidad, y como no sabe con quién ir acompañado, acaba acudiendo con su amigo hipocondríaco, su hijo raptado y una prostituta. En esta película, aparecen los ingredientes que definen a Woody Allen: las infidelidades, los terapeutas, Nueva York, los judíos y las situaciones surrealistas (la muerte que se equivoca de persona, la abuela ciega que pilla a los amantes, la bajada al infierno del protagonista). Las situaciones están formadas por personajes histéricos que gritan, hablan a la vez y se interrumpen. Todo esto acentuado con un montaje taquicárdico que muchas veces no permite ni captar los chistes más crueles (“Esa era paralítica, se ponía el támpax por la nariz”). “Desmontando a Harry” es un homenaje de Woody Allen a sí mismo, donde el protagonista sólo sabe manejarse en un mundo imaginario pero no en la vida real. Allen es como uno de sus personajes (y el mejor jamás creado por él): El hombre desenfocado, cuyo entorno ha de comprarse gafas para adaptarse a su distorsión. May
Siento predilección por el Woody Allen actor, por la pareja Allen-Keaton y por sus películas semi-underground de principios de los 70. El Dormilón cumple las tres características: es una comedia absurda de ciencia ficción con toques freudianos e historia de amor incluida. Divertida hasta morir, El Dormilón incluye diálogos históricos de la filmografía de Allen (“¡Mi cerebro es mi segundo órgano favorito!”) y un final perfecto (“No creo en la ciencia, la ciencia es un callejón intelectual sin salida. Creo en el sexo y en la muerte: dos cosas que pasan una vez en la vida”). Otra de las imprescindibles es La rosa púrpura del Cairo, una de las menos típicas de Woody Allen, la peli que hace callar a los que le acusan de contar sólo historias de grandes ciudades y personajes neuróticos. Es una historia de cine relacionado con el cine, donde se plantea la elección entre realidad o ficción. Mucho sabe de evasión y magia del cine un director que no deja pasar un año sin rodar una película. Ellie
Pocas películas de Woody Allen provocan críticas tan variadas como las que logró Vicky Cristina Barcelona. Para un director con una producción tan intensa como la de Allen, que presenta una película nueva cada año, la calidad cobra un valor distinto. Ya no se trata de hacer obras de arte, si no de disfrutar de todo lo que implica hacer cine. Vicky Cristina Barcelona fue muy criticada en su día por perder gran parte del sello del director, por olvidar sus rupturas narrativas, por volverse, dijeron algunos, demasiado clásica. Sin embargo, Vicky Cristina Barcelona tiene, además de un título horrible, una representación perfecta de una de las marcas de estilo de Woody Allen: sus diálogos. Esta es una película del humor en los diálogos y no en las situaciones, de matices, de choque de visiones en la que ninguna sale bien parada. Vicky, con su estilo de vida tradicional y equilibrado; Cristina, que lleva la “búsqueda de lo bohemio” a su máxima expresión. Ninguna sale impune y, después de un intenso verano en Barcelona, regresan a casa más cerca que nunca. No por haber encontrado la razón en la visión de la amiga, si no por haberse topado con la sinrazón de la suya propia. Una película sencilla y muy bien ordenada, que logra su máximo esplendor con la aparición de Penélope Cruz. La española borda un papel totalmente exagerado y delirante, que desde que aparece en escena nos hace desear que lo hubiera hecho antes. Bea
Annie Hall fue la primera gran película de Woody Allen y es sin duda una de mis favoritas. No sólo amo a los personajes y sus conversaciones, algo que me pasa a menudo con las pelis de Allen, sino que me encanta como disecciona una relación de pareja. Desde su encuentro casual y nada prometedor (algo genial en la vida misma, nunca sabes quién va a jugar un papel importante en tu vida) y hasta el final de la película, que por muchas veces que la vea, parece que nunca sé cómo va a acabar (y tampoco en la realidad sabes quién es esa persona que solo está de paso). Todo esto tratado con el aire irónico y cínico de Allen, y la mirada y personalidad abierta de Diane Keaton, hacen que nunca me canse de ver esta película. Os dejo con el monólogo del principio de la película, uno de esos momentos 100% Allen. Laura
Por fin blogger nos dejó homenajear a Allen!Sergio, tengo muchas ganas de leer crítica de Paris a Medianoche que ayer acabé en le cine y no me pude resistir!
ResponderEliminarYa la has visto?! Mmmmmm...Eli, tienes que verla antes de irnos a Ibiza o te torturaremos como hicimos con Laura y Cisne Negro!!!:D Tenemos que comentar YA!!!
ResponderEliminarooooooohhhhhhh.....mi venganza!!!
ResponderEliminarVaya!! tres de mis pelis favoritas no salen en el artículo!!! y es que tengo debilidad por "Delitos y Faltas" y "Hannah y sus Hermanas". También tendría que destacar "Match Point", claro, pero en general todas me gustan excepto "Vicky Cristina Barcelona" que me aburrió soberanamente...
ResponderEliminarEn fin, soy muy fan del pequeño genio Woody.
Gracias por el artículo-homenaje!
P.D.:Aún no he visto "Midnight in Paris"!!
GENIAL DESMONTANDO A HARRY!!!!!!
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=fkMSri8CgQk&feature=related
minuto 04:26!!!