I'm not there

Navegando por no sé que blog musical el otro día me enteré de que ha sido estrenada en España I'm not there. La noticia me sorprendió mucho y me alegró aún más, ya que ahora no tendré que explicar que mi peli favorita no está estrenada en España.

Recapitulemos: I'm not there es una "biografía" de Bob Dylan, dirigida por Todd Haynes (Velvet Goldmine, Lejos del Cielo). Fue estrenada en el 2006, yo la conseguí el verano pasado via Amazon asumiendo que no llegaría a estrenarse en España. Afortunadamente, me equivoqué, aunque aún no termino de entender por qué no la estrenaron en su momento. Bob Dylan ha estado muy de moda estos últimos años en España, gracias al documental No Direction Home, el premio Príncipe de Asturias y su gira.


I'm not there es lo más alejado a un biopic musical al uso. Ray, En la cuerda floja, La vie en rose... son más o menos buenas películas que tienen en común un protagonista que busca mimetizar al músico, contínuas referencias a una infancia atormentada y problemas con las drogas. En general, dan una visión con luces y sombras y una tesis sobre la vida del artista.

I'm not there va más allá. Lo característico de esta película es que el personaje de Bob Dylan está segmentado en 7 personajes diferentes, interpretado por seis actores diferentes. Cada uno de los personajes hace referencia a una etapa o a una faceta de la vida de Dylan, con un nombre y una estética completamente diferente. El montaje va intercalando las historias, de modo que todas acaban relacionadas entre sí. Puede ser un poco difícil de seguir en el primer visionado, especialmente si no se conoce la biografía del artista. Voy a desarrollar un poco estas siete identidades como guía:


-Jack, el profeta. Interpretado por Christian Bale, esta historia trata sobre los primeros años de la carrera musical de Dylan, cuando se convierte en el profeta del folk.

-John, el cristiano renacido. También interpretado por Christian Bale, este personaje hace referencia a la conversión al cristianismo que tuvo Dylan en los 80. Bale hace aquí una interpretación mucho mejor que con Jack, el joven Dylan. El fanatismo religioso que muestra es realmente espeluznante (y cierto).

-Woody, el farsante. Este personaje hace referencia a la infancia inventada que Dylan contaba a la prensa en sus primeros años de carrera. Woody es un niño afroamericano que viaja en trenes de mercancías, vagabundea por el país y actúa tocando canciones de su héroe, Woody Guthrie.

-Jude, el mártir del rock&roll. Cubre la gira europea de Dylan en el 65, en la que es acosado por sus antiguos fans por pasarse a la guitarra eléctrica. Esta es la única historia en la que el personaje se parece físicamente al verdadero Bob Dylan, lo que tiene bastante gracia ya que le interpreta una mujer. Cate Blanchett hace una interpretación prácticamente perfecta, logra parecerse a Dylan más que él mismo. Que le hayan dado un Oscar por El Aviador y no por esta actuación no me entra en la cabeza. La historia es un homenaje a 8 y 1/2 (no como Nine, que es prácticamente un plagio) con claras referencias estilísticas y sobre todo por la situación del protagonista, un artista en lo alto de su carrera y en la más profunda crisis personal.

-Arthur, el poeta. Un joven Ben Whisaw da vida a un Dylan recién salido de la adolescencia que mantiene sus primeros enfrentamientos con la prensa. Todos los diálogos de este personaje son verdaderas citas de Dylan.

-Robbie, la estrella. Heath Ledger interpreta a Robbie, y Charlotte Gainsbourg interpreta a Claire, personaje basado en las dos primeras mujeres de la vida de Dylan. Esta historia está basada en su relación, desde su enamoramiento en el Village a su divorcio. Se aleja del tópico de los roles marido artista-libre, mujercita alienada-controladora y nos muestra a un Dylan cruel, egoísta y machista hasta la médula.

-Billy, el fugitivo. Esta identidad es posiblemente la más extraña y surrealista. Cuenta la historia de un Dylan maduro, interpretado por Richard Gere, que en algún momento de su carrera se hizo pasar por muerto y se fue a vivir al bosque cual ermitaño. Esta identidad se mezcla con la leyenda de Billy el Niño y Pat Garrett, el sheriff que le atrapó.

La película gana con más de un visionado, y es especialmente atractiva para los fans de Bob Dylan por los contínuos guiños que tiene a su propia historia. Sin embargo, se la recomiendo a todo el mundo: cuenta con un reparto muy bueno, la puesta en escena es muy interesante y sobre por la visión tan particular que tiene sobre la identidad:

"Puedo cambiar en el transcurso de un día. Me levanto y soy una persona, y cuando me acuesto sé con seguridad que soy otra. No sé quien soy la mayoría del tiempo."

"Todo lo que quiero ser es ser yo, quienquiera que eso sea"