Pan Am

Todas las temporadas nacen series que resuenan como grandes favoritas y que se quieren posicionar entre las predilectas del público. Al acabar el verano, una de ellas  era 'Pan Am'. Un conjunto de azafatas de la famosa aerolínea americana que viajan por el mundo en la década de los 60.

Probablemente sea una de esas series que no lleguen muy lejos, dos o tres temporadas(si supera esta primera) y se olvidará del imaginario colectivo, aunque por ahora cumple con una de las principales misiones de una serie: entretiene.

Sin embargo a mucha gente le ha decepcionado esta serie ya que no alcanza los estandartes de calidad que habría de esperar, más aún cuando no se paraba de comparar con 'Mad Men'. Pan Am se sitúa una década después de la serie mencionada y no es casualidad que las protagonistas azafatas. Los 60 fue una década que supuso muchos cambios para las mujeres...Estas empiezan a querer algo más que una familia y una casa perfecta. Sin embargo, como se demostrará a posteriori y esta serie deja entrever, solo supuso el doble de presión para el sexo femenino, donde el querer estudiar y trabajar era solo una añadidura a encontrar marido y tener la casa hecha un primor. El conjunto de protagonistas, que es encabezado por Christina Ricci (nunca mejor dicho, ya que la cabeza es lo que más destaca de su esquelética figura. ¿Y no ha habido siempre un mínimo de altura para ser azafata?) se enfrentan a prejuicios de la época, a la vez que se pesan en la oficina antes de encarar un día de trabajo. Son las mujeres perfectas, de donde salió el mito de la azafata: listas, con idiomas, complacientes y por su puesto bellas y de cuerpo escultural. No es la primera vez que esta figura tiene su minuto de gloria en la pantalla, ya que son las mismas azafatas retratadas en la película "Atrápame si puedes" con Leonardo Dipacrio pasando inadvertido entre tanta mujerona.

Los recursos narrativos con los que cuenta la serie también nos recuerda a una serie anterior de muchísimo éxito: 'Lost'. Los capítulos se centran en mostrar el presente y desenredar el pasado de cada una de las protagonistas para averiguar qué les ha hecho llegar hasta allí. Además no dejamos de meter ingredientes en este coctel, pues también es una serie que incluye la intriga y el misterio. Demasiados ingredientes para no saber a nada. 

La serie comienza con la desaparición de una de las azafatas que trabajan para la CIA y el reclutamiento de otra de ellas, el papel interpretado por Kelli Brianne Garner (una irreconocible Margo de la película 'Lars y una chica de verdad'). Esta década también fue de gran agitación política, por lo que la agente de la CIA da mucho juego, aunque hay que avisar que pasan por encima lo temas políticos de la época y lo maniqueos que son en la mayoría de ellos. En el capítulo piloto rozan la vergüenza ajena con Christina Ricci hablando español para sacar a exiliados cubanos de la isla, tras lo que se puede intuir que fue la invasión de la Bahía de Cochinos. Mientras el piloto le pide en matrimonio a una de las azafatas en las escaleras del avión, al mismo tiempo suena una arrolladora banda sonora. El clímax de lo cutre. 

Se hecha de menos el mimo en los detalles, ya que varios espectadores se han quejado de la inexactitud de algunos datos históricos, como en un momento en que las chicas se ponen a bailar una canción que en realidad salió unos años después del año en que se encuentran. Y se hecha de menos la profundidad de los personajes, su lado oscuro, su yin y su yang. Y aunque probablemente ningún presupuesto se lo puede permitir, qué caramelo es que estén viajando por todo el mundo, qué imágenes nos podrían acercar. Lo resuelven con escenarios que se notan prefabricados. 

Y a pesar de todo ello, es un serie fácil de ver que te deja con la incertidumbre justa entre amoríos, espías y recreación de una época. A pesar de ello creo que los datos de la audiencia nos les han sido del todo favorables. Por ello han contratado a una de las chicas Crepúsculo, Ashley Green, a ver si arrastra un poquito más de audiencia y evitan estar en la cuerda floja durante las renovaciones de series.