The Blind Side, película escrita y dirigida por John Lee Hancock, es una de las nominadas, este año, al Oscar a Mejor Película. Un galardón por el que luchan 10 títulos en la edición número 82 de los premios de la Academia. No es probable, sin embargo, que sea esta la película que se lleve el gato al agua.
Al más puro estilo de serie america, The Blind Side presenta la historia de Michale Oher, un chico huérfano, acogido por una familia con dinero que se hace cargo de su educación y apoya su carrera deportiva. Una versión muy floja de la serie The O.C., donde al menos los espectadores podían deleitarse con los protagonistas, sus casas y su banda sonora. En este caso, la estampa del sueño americano la componen un chico tímido y reservado (¿Ryan?), con importantes limitaciones en el aprendizaje, y una familia modélica, con hijos tolerantes, estudiosos y deportistas. A esta versión cinematográfica de The O.C. hay que unirle también unas pinceladas de Friday Night Lights, por el tratamiento narrativo de los partidos de fútbol y de todo lo que rodea al deporte.
La película es un intento muy simple de emocionarnos con una historia de lo más manida. El final es previsible desde que te acercas a la sinopsis por primera vez, a pesar de que el comienzo, innecesario y confuso en relación con el producto final, hace presagiar una historia diferente. Los personajes son auténticos prototipos. El joven desamparado, de gran corazón, que ha crecido en un barrio complicado y lucha por buscar una salida. La madre, bondadosa y tolerante (frente a sus amigas, también típicas, racistas y marujas), que lucha por darle una oportunidad al chico. El padre, un auténtico apoyo… Los hijos, esos adorables angelitos que toda familia de clase media-alta americana querría tener (el niño pequeño, aunque sin llegar a aportar tanto como Seth Cohen, protagoniza los momentos más entretenidos de la película).
Quizá la experiencia del director como en el mundo de la televisión haya tenido que ver, no sólo en la historia escogida, si no también en la estuctura narrativa de esta. La impresión constante es de estar viendo una serie. Por ejemplo, las tramas y subtramas que se suceden y resuelven durante todo el film, marcando lo que podrían ser claramente capítulos diferenciados. The Blind Side cae también en los tópicos más trillados del género, como el retrato superficial que hace de los suburbios o el discurso pro-integración que se ve marcado por las evidentes incoherencias de la película (todos los negros en The Blind Side son, o parte de un ghetto, o trabajadores de asuntos sociales, mientras que en el colegio o los equipos deportivos hay únicamente blancos).
Salva la película, y de manera sorprendente, la interpretación de Sandra Bullock, no tanto por lo buena que sea (que lo es) como por abrirnos los ojos a todos los que observábamos con escepticismo como una mujer que había protagonizado Miss Agente Especial recibía el Globo de Oro. Sin embargo, de rubia (¿para alejarse de esos papeles de prota de película romántica?) y alejándose un poco de esa imagen de sex simbol, Sandra Bullock borda un papel de madre coraje, con fuerza, carácter y carisma. Una interpretación a la que sólo le falta un personaje a la altura, menos prototípico y con más matices, que habrían hecho que estadounidense brillara aún más. Sobre si se merece o no el Oscar, tengo mis dudas, pero ya el hecho de ver a esta mujer reconducir su carrera es digno de reconocimiento.
No sé por qué se considera que es la primera película seria de Sandra Bullock. En "Prácticamente magia" tiene un papel bastante dramático, y ya ni digamos en "Crash", que, por cierto, lo borda.
ResponderEliminarAunque también creo que no es justo que cuando un actor de películas de retrasados hace una buena película de repente se lleve todos los premios. Tipo Jim Carrey, Will Smith... Se tendría que valorar la carrera en conjunto.
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ResponderEliminarPues a mi en "Prácticamente magia" sigue pareciendome la misma, pero con lágrimas. No sé, es que no la aguanto, la debí de coger manía en "Amor con Preaviso", que fue la primera peli suya que vi y fui a ver al cine. En "Crash" no la he visto, y por lo que tengo entendido tiene alguna más decentilla.
ResponderEliminarAún así, creo que Sandra Bullock está metida (correcta o incorrectamente) en el mismo saco que Cameron Diaz o Jennifer Anniston y que por eso sorprende. Estoy de acuerdo en que no es motivo alguno para darle Oscars, yo les daría más bien una palmadita en la espalda y la enhorabuena por haber elegido bien la película.
Eso sí, en lo que no estoy de acuerdo es en que tenga que valorarse la carrera en cojunto. Eso para el Oscar de Honor, vale, pero para un premio puntual, creo que debeía aislarse el trabajo que hace, sin tener en cuenta nada más. Y si no tenemos en cuenta nada más, Sandra Bullock hace un papel muy bueno, pero no tengo yo muy claro que sea mejor que el de Carey Mulligan, que es la única nominada más a la que he visto.
Hablando de Sandra Bullock, acaba de llevarse el Razzie... xD
ResponderEliminarQué maja, acabo de verla en el telediario recogiéndolo y me ha parecido divertidísima. Ahora ya me cae bien.
ResponderEliminarEs la mejor. No ha sabido y, probablemente, no le han dejado escoger buenos personajes. Yo creo que ese es el principal problema de su carrera, aunque, por fin, ha sido reconocido su talento. Si uno tiene un rato y cotillea se dará cuenta de que mi querida Bullock tiene más nominaciones a los Globos de Oro que, por ejemplo, Catherine Zeta-Jones (a la que no se ha vuelto a ver). No sé, esperemos que después de semejante éxito elija bien su próxima aparición. He de reconocer que las nominaciones no, pero la entrega de algunos premios, como el Oscar, puede que haya sido porque este año ha sumado más de 600 millones de dólares en las taquilla.
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