viernes, 22 de enero de 2010

Bergman y los prejuicios anti-gafapasta


Todos odiamos a los gafapastas,
y todo lo que ellos representan: la música indie coñazo, los flequillos en los ojos y las camisas de cuadros, las fotos con cámaras reflex ante el espejo, los comentarios tipo “el teatro nunca morirá, porque yo puedo bajarme al parque y hacer teatro”, y un largo etcétera. En cine, estaríamos hablando de las obras de avant-garde, la nouvelle vague, el cine de autor, el art-cinema. Me dan escalofríos solo de escribirlo, hacen pensar en peliculas coñazo de esas que ponen en la filmoteca en sus rachas malas, esas en las que no hay diálogos ni sonidos, y la imagen nos muestra una cama deshecha donde no pasa nada durante cuarenta minutos. En definitiva, cine de alto nivel intelectual que aburre soberanamente al espectador, a no ser que el espectador sea aficionado a la masturbación mental y le gusten este tipo de profundeces filosóficas, ¿sabéis a que me refiero? Es muy fácil odiar a los gafapastas.

Todo esto viene a cuento de que hoy he visto mi primera película de Ingmar Bergman, Fresas Salvajes, y me he tenido que comer todos mis prejuicios con patatas. Iba bastante predispuesta a ver una película pretenciosa y aburrida, a que no me gustase y a decir que está sobrevalorada. Y no puedo decir ninguna de estas cuatro cosas.

No sé describir muy bien de que va Fresas Salvajes. Es la historia de un anciano, que viaja en coche a Lust para un aniversario de los 50 años de su graduación, y durante el trayecto sueña y recuerda su vida. La película destaca por unas imágenes atrayentes y sobre todo diálogos divertidos y memorables. Es innovadora sin dejar de ser digerible; narrativamente bastante ágil y tiene personajes secundarios m´as que entrañables (la madre del protagonista, los tres jóvenes, y muy especialmente la genial Sra. Agda). Es uno de esos clásicos del cine que cuando una al fin los ve, comprende por que son clásicos. Para mí, es una película mas que recomendable, por eso pido que dejemos al lado los prejuicios antigafapastiles y le demos una oportunidad a este tipo de películas. Fresas Salvajes merece mucho la pena, lleves o no gafas de pasta.

15 comentarios:

  1. Se nota que vas encaminada al mundo del periodismo, de cabeza.

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  2. de nada, aunque no era un cumplido jajajajaj

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  3. Me gusta la crítica, sobre todo el primer párrafo, ya sabes jajaja.
    El caso, que a mí las películas gafapastas y los clásicos me gustan. Pero me gustan como cuando ves un cuadro en un museo q dices: "sí, mira, q bonito, el azul ese me gusta...", que en cierto modo te estás forzando a que te guste o a encontrarle algo bueno. Es decir, nunca me llegarán a emocionar como cualquier película contemporánea. Y no son prejuicios, son hechos.

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  4. Eli tengo que echarte un poco la bronca por el tema de los gafapastas, no entiendo como puedes clasificar a un tipo de cine, musica, estetica u otra cosa como gafapasta, y decir que odias a estos. Realmente gilipollas hay en todos lados y de todos los colores, pero esto del gafapastismo es algo super ambiguo, todo el mundo los odia pero en el fondo tenemos un pequeño gafapasta dentro de nosotros, y ultimamente empiezo a leer a gente que arremete contra este fenomeno como algo negativo, cuando en realidad no es ni mas ni menos que una moda que empieza a desgastarse. Pero Bergman estaba haciendo cine desde antes que la madre del gafapasta empezara a andar, asi que creo que lo de gafapasta le viene muy muy pequeño.
    Yo de Bergman he visto pocas pelis, pero si te puedo recomendar El septimo sello y el huevo de la serpiente, que son de las pelis que cuando las ves te quedas toda la tarde pensando en ellas, para mi son increibles. Espero que las eches un ojo y escribas algo sobre ellas, me encantaria leer tu opinion.

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  5. Me has convencido eli, y en mi micromundo eso es un piropo. ;-)

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  6. Sergio, con el odio a los gafapasta me estoy refiriendo al tipico prepotente intelectualoide estudiante de comunicacion audiovisual que recoge todas esas cosas que ponia al principio como seña de identidad, o que las eleva como algo superior que le distinguen a el por encima de toda la raza humana. No digo que porque te gusten Belle and Sebastian y Fellini merezcas la muerte, pero si sueltas comentarios como "Belle and Sebastian son el unico grupo que ha sabido sobrevivir a los 90" o, "8 y 1/2 deberia reponerse todos los años en la 1" pues eres una persona mas que odiable. No son las cosas, es la actitud. Por eso he defendido Fresas Salvajes, porque creo que muchos nos dejamos llevar por prejuicios contra esta gente y nos perdemos cosas muy guays. Que a mi tambien me gusta 8 y 1/2, e incluso Belle and Sebastian (algunas canciones). ¿hay una gafapasta en mi interior? Si, eran muy de pasta las gafas que me pusieron con 5 años, pero afortunadamente he superado esa etapa. Yo no quiero ir por ahi regodeandome en el esnobismo ni en toda la alta cultura que consumo.
    hala, creo que ya lo he dicho todo.

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  7. De todos modos. Rebuscando he visto que es el mismo crack que el que hizo el septimo sello. Quizás deberia re-verla, pero cuando lo hice allá por los 16 me pareció una autentica maravilla.

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  8. Chapó por la explicación del gafapastosismo.

    Tal y como yo lo veo, puedes ser un apasionado de Radiohead y no serlo o simplemente decir "Radiohead es amor" y tirar por la borda tu reputación... xD (es bromita, es bromita).

    Ahora en serio, todos reconocemos a un gafapasta cuando lo vemos. No hace falta que nos digan que les gusta tal o pascual, simplemente es escucharle hablar de todo en la vida como si hasta una lombriz fuera un tema trascendente que cambiará el curso del mundo y lo sabes...

    ...ahora que lo pienso, también nosotros encajamos ahí... pero creo que somos simplemente prepotentes, no gafapastas. xD

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  9. Por cierto, me hace gracia que creo que Mayte quien, el año pasado, me habló de esa película (ya sabes, para su trabajo de Representación). Entonces no le di ningún crédito, pero si también la sugieres tú, me vale.

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  10. Vamos a ver, odiadores empedernidos!
    Yo creo que lo que se odia, es la actitud y no a la persona.
    A cualquier persona le pueden gustar las mismas cosas que a un gafapasta (los clásicos, cierto tipo de música, estética, hacer teatro en un parque...) y no ser detestable porque no ostentas la actitud de la verdad absoluta ni miras al resto por encima del hombro.
    Así que yo creo que no se resume en unos ciertos gustos o personas sino en una cierta forma de tratar a los que te rodean.
    Dejando eso dicho: me encantan los clásicos, me muero de ganas de ver a Bergman y hacer teatro en un parque es una de las cosas más divertidas que he hecho.(Y aún así no me considero gafapasta aunque las mías de snoopy eran una monada, jaja)

    Y May, otra cosa que añadir. Tu comentario sobre los clásicos no son prejuicios pero tampoco son hechos, son gustos.
    A mi me han llegado a emocionar algunos clásicos mucho más que muchas películas contemporáneas. Depende del ojo que lo vea.

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  11. Pero bueno, Alberto!
    ¿No eras tú quien decía que todos los gustos eran igual de válidos y que los gustos de la gente son los indicadores de calidad de algo?
    ¿Te retractas?

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  12. Que va , solo digo frases bobas cuando me aburro.

    Pero eso si , yo nunca dije eso que dices. Yo dije que la calidad de algo era relativo a lo que se quisiese medir.

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  13. No se trata de prejuicios, Bergman no era un mal director en absoluto, el problema con este personaje... son precisamente los entusiastas que se le han venido acumulando en el guardafangos, a el y a muchos directores. Para el gafapasta ninguna película de Bergman, Tarkovsky, Godard y compañía es mala, estos son capaces de descubrir los secretos del universo con el plano de un paramecio metido con calzador por 10 minutos en la cinta.
    Es que "tu no la entiendes por eso no gusta", ese sera su sempiterno discurso de debate y por esto son deleznables.

    Lo que a usted le paso es totalmente normal, incluso es mejor y mas saludable, no toda la filmografía de Bergman le tiene que gustar.

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